jueves, noviembre 16, 2006

Odios

Tras un tiempo sin escribir nada, primero por motivos de fuerza mayor (mi línea ADSL puso en jaque a Telefónica hasta que dieron con el problema), segundo porque tengo muchísimo trabajo, aquí estoy de nuevo.
Y que mejor que para hablar de mis odios particulares. Algunos son manías, otros son costumbres pero estos son los momentos y circunstancias que me sacan de quicio:
- Odio cuando las orejas se me ponen rojas y siento calor en ellas. Si pudiera me las arrancaría, odio esa sensación.
- Odio cuando el pantalón se mete por debajo de la lengüeta de la zapatilla de deportes.
- Odio que me griten, en cualquier circunstancia, con motivos o sin ellos. Para que subir la voz si te voy a oir igual en un tono normal.
- Odio que me toquen la barriga en plan "uhhh a ver si comemos menos".
- Odio los prejuicios musicales. Cuando gusta algo no hay que menospreciarlo. Una cosa es no entender los gustos de otra persona y otra muy distinto mofarse de ellos.
- Odio la lechuga porque se me repite. Sí señores, se me repite.
- Odio hablar de política porque siempre termino cabreado.
- Odio que hablen en el cine. Y si me toca un devorador de palomitas al lado me pone muy nervioso.
- Odio el msn. Con toda mi alma, con todo mi organismo.
- Odio esperar. Soy muy nervioso y el tener que esperar a alguien o el tener que hacer cola me saca de quicio. Así que, como consecuencia, odio a los impuntuales.
- Odio la frase "Qué bien viviis los profesores!", aunque no lo niego.
- Odio las impresoras. Por mucho que la informática avance ese aparato siempre nos dará por saco.

Aun con todos estos odios, soy una persona tolerante. No os asusteis. Aunque os esté odiando enormemente no me lo notareis :P

4 comentarios:

Anónimo dijo...

bonita deklaración d principios.

yo amo el bokadillo de tortilla de lechuga

;^***

Dani 🍋 Дани dijo...

me da miedo sobre todo lo último, que aunque nos odies no lo notaremos!!!

sobre la música tenemos que hablar, jijiji.

besis, guapo!

Anónimo dijo...

Decía el escritor español Noel Clarasó "Odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro".
¿No crees que es una perdida de tiempo el odiar? Se puede detestar, molestar... Pero jamás odiar.
A tu favor he de decir que yo también detesto algunos de los puntos que has puesto así como algunas otras como los prepotentes, las personas que no ven el lado humano de las cosas, las injusticias, los abusos... Y tantas y tantas cosas...
Un saludete!

Anónimo dijo...

jajaja me alegra saber que pese a compartir muchas filias tb compartimos alguna que otra fobia

lo del pantalon debajo de la lengueta de la zapatilla es superior a mi pero nunca me habia parado a pensar!! jajaja :D