Sí, lo sé. No tengo vergüenza de dejar esto abandonado prácticamente un mes pero entre el cambio de pc (ya tengo el nuevo, el que dije que iba a comprar, más mono él...), que he tenido bastante jaleo los fines de semana con visitas y también en semana santa, las pocas cosas que contar y la pereza... van pasando los días y no escribía nada.
Intentaré volver al ritmo de entradas de antes, pero no prometo nada, ya sabeis que una de mis características básicas es la incosistencia. No consigo aguantar con algo mucho tiempo. Ni con regímenes, ni con hábitos, ni con nada...
Pues eso, no ha habido grandes novedades en estos días. Vamos sobreviviendo al paso de los días como buenamente se puede. Vamos superando los momentos aburridos con otros menos aburridos. Vamos sobrellevando la monotonía con la ayuda de los amigos que más lejos se tienen.
A 2 meses del verano, otro curso se va. El tiempo pasa cada vez más rápido, se escapa y esa sensación (tantas veces explicada en este blog) de pérdida de tiempo continua y continua...
Como veis, el piti va y viene, como las mareas, pero el agua no se renueva. Es un círculo vicioso de sentimientos que se repiten como en un torbellino.
Vaya entrada más caótica, perdonadmelo. No tenía nada que contar y he escrito tal como me han venido las ideas a la mente. Y por ese motivo voy a cambiarle el título a esta entrada (Título original: La vuelta del piti).
Hasta pronto!
Intentaré volver al ritmo de entradas de antes, pero no prometo nada, ya sabeis que una de mis características básicas es la incosistencia. No consigo aguantar con algo mucho tiempo. Ni con regímenes, ni con hábitos, ni con nada...
Pues eso, no ha habido grandes novedades en estos días. Vamos sobreviviendo al paso de los días como buenamente se puede. Vamos superando los momentos aburridos con otros menos aburridos. Vamos sobrellevando la monotonía con la ayuda de los amigos que más lejos se tienen.
A 2 meses del verano, otro curso se va. El tiempo pasa cada vez más rápido, se escapa y esa sensación (tantas veces explicada en este blog) de pérdida de tiempo continua y continua...
Como veis, el piti va y viene, como las mareas, pero el agua no se renueva. Es un círculo vicioso de sentimientos que se repiten como en un torbellino.
Vaya entrada más caótica, perdonadmelo. No tenía nada que contar y he escrito tal como me han venido las ideas a la mente. Y por ese motivo voy a cambiarle el título a esta entrada (Título original: La vuelta del piti).
Hasta pronto!